MADRID.- El Rey Juan Carlos viajará mañana a Arabia Saudí, el mayor de los seis países del
Golfo Pérsico, donde empresas españolas tienen importantes negocios
-como la construcción del AVE entre Medina y La Meca- para continuar su
gira por esta región en apoyo no sólo a las grandes firmas ya asentadas,
sino también a las pequeñas.
Acompañado de tres ministros
-Defensa, Fomento e Industria- y de casi una treintena de empresarios
españoles, don Juan Carlos llega mañana a Yeda, en cuyo aeropuerto le
recibirá el príncipe heredero, Salman bin Abdelaziz, para retornar a
Madrid el lunes 19.
Se trata del tercero de los cuatro viajes que
el Monarca ha programado a los seis países del Consejo de Cooperación
de Golfo (CCG), de los cuales ya ha visitado Emiratos Árabes y Kuwait
-entre el 13 y el 16 de abril- y Omán y Bahrein, del 27 de abril al 2 de
mayo, igualmente con directivos de empresas españolas.
Al igual
que en las dos etapas anteriores, la finalidad de su visita oficial es
primordialmente empresarial y económica, porque su presencia, según
fuentes diplomáticas, puede dar un "impulso" a millonarios contratos
pendientes de licitación, en un país que va a dedicar 375.000 millones
de dólares a inversión pública entre 2010 y 2015, con muchos proyectos
de interés para las empresas españolas.
El AVE entre Medina, Yeda
y La Meca, una línea férrea de alta velocidad que transportará a
160.000 peregrinos al día, es uno de los contratos a los que han
accedido las firmas españolas a través de un consorcio hispano-saudí en
el cual los españoles representan el 88 por ciento.
Aunque se
barajó la posibilidad de que el Monarca visitara las obras del AVE a La
Meca, que tras la culminación de la obra civil por parte de un consorcio
chino entran en su segunda fase, ya con participación española,
finalmente don Juan Carlos no lo hará por el intenso calor que hace en
la zona en esta época del año.
Tampoco está prevista una
entrevista entre el jefe del Estado y el rey Abdalá, debido al delicado
estado de salud del soberano saudí, de 91 años, pero don Juan Carlos,
junto a los tres ministros, sí lo hará con el príncipe Salman bin
Abdelaliz.
Con el 20 por ciento de las reservas mundiales de
crudo, Arabia Saudí es el mayor productor y exportador de petróleo del
planeta, pero su fortaleza no es sólo económica, ya que su monarquía
islámica tiene un papel de liderazgo en el mundo árabe, al que
contribuye el hecho de que rey Abdalá sea el custodio de los Santos
Lugares.
Para España, se trata de un mercado "maduro", porque las
empresas españolas están fuertemente asentadas allí, hasta un centenar
de grandes firmas de diversos sectores -construcción, transportes,
energía, ingeniería...- con cuyos directivos se reunirá don Juan Carlos
el lunes 19 antes de retornar a España.
Uno de los propósitos del
viaje es introducir en Arabia Saudí a pequeñas y medianas empresas que
pueden entrar en este mercado de la mano de las grandes y por ello,
dentro del grupo de empresarios que acompañan al Rey en esta ocasión
figuran directivos de estas pymes.
Además de los ministros de
Defensa, Pedro Morenés, Fomento, Ana Pastor, e Industria, Energía y
Turismo, José Manuel Soria, la delegación está integrada por los
secretarios de Estado de Exteriores, Gonzalo de Benito, y Comercio,
Jaime García-Legaz, el alto comisionado para la Marca España, Carlos
Espinosa de los Monteros y la secretaria general de Transportes, Carmen
Librero.
Aunque será un viaje corto, tiene un intenso programa de
actividades, con ocho actos consecutivos a lo largo del domingo 18,
jornada en la que el Rey se entrevistará con el príncipe heredero,
recibirá información sobre la marcha de las obras del AVE, y los tres
ministros celebrarán reuniones con sus colegas saudíes.
Está
previsto que se firmen dos acuerdos, uno en materia de seguridad y
cooperación antiterrorista, y otro sobre colaboración entre las escuelas
diplomáticas de ambos países.
Punto culminante será el único
discurso que pronunciará el Monarca en la clausura de un foro de las
Cámaras de Comercio de España y Arabia Saudí, el domingo por la tarde.
